Qué Sistema – Diciembre 2022

De expansión-ahondamiento (sin fronteras ni muros burgueses) en el comunalizarse-territorializarse de los pueblos en contra de la criminalidad capitalista de lesa naturaleza y de lesa humanidad.


Conciliación de clases/ Concentración y centralización capitalista/

Alternativas emancipatorias

Conciliación de clases

Sepamos que, al revés del inculcado sentido común de menoscabo de las luchas socioambientales, la justicia ambiental actualiza la justicia social y la sanitaria al hacerse cargo sobre cómo el capitalismo expropia territorios, los devasta al mismo tiempo que somete a sus comunidades a desaparición forzada, enfermedades y miseria. Y este avance del malvivir sólo podemos comenzar a frenarlo si ponemos fin a nuestra complicidad. Se trata de superar nuestra conciliación con nuestros opresores mediante revisión crítica, por ejemplo, de cuáles son las consecuencias de las elecciones desde hace medio siglo. Y preguntarnos si no es hora de cuestionar promesas de quienes se postulan como nuestros redentores y además, sus basamentos en nuestra incapacidad colectiva de hacernos cargo de emanciparnos.

El Movimiento La Ciudad somos quienes la Habitamos, este 24 de noviembre, se presentó como espacio político. Esclarece que:

Es el encuentro de asambleas, colectivos, movimientos villeros, organizaciones sociales, cátedras universitarias, referentes/as sociales, ciudadanas/os autoconvocadas/os que se unieron para impulsar una forma de vivir, concebir y construir la Ciudad de Buenos Aires y su área metropolitana, bajo el paradigma del Derecho a la Ciudad, la Democracia Participativa, la defensa de lo Público y el Buen Vivir, porque la ciudad de hoy no es un espacio vital para todes. 

Apreciemos su explicación de porqué se transforma en espacio político:

La conformación de este espacio tiene que ver con “la falta de soluciones reales ante las problemáticas que viven les ciudadanes”. Entre los ejes que abordarán en el espacio, se encuentran la crisis habitacional, el extractivismo urbano, la crisis climática, la emergencia ambiental, y la violencia institucional, entre otros. Todos estos ítems estarán atravesados por la idea de generar una nueva forma de organización ciudadana acorde a la Democracia Participativa.

María Eva Koutsovitis, integrante de El Movimiento, destaca que “la Ciudad de Buenos Aires hace décadas que viene consolidando un modelo urbano basado en el despojo y destrucción de nuestros bienes comunes y nuestro patrimonio. El resultado de este modelo ha sido la precarización del conjunto de las dimensiones de nuestra vida urbana. Creemos que tan importante como definir adecuadas políticas públicas, es cuestionar el actual sistema de toma de decisiones. Por eso, desde El Movimiento queremos reapropiarnos del poder decidir comunitariamente como queremos vivir para dar respuesta a los problemas estructurales que padecemos el conjunto de la ciudadanía ”.

Jonatan Baldiviezo, también integrante de El Movimiento, expresó: “El movimiento tendrá como objetivo, por una parte, afrontar el desafío de construir un espacio político a la altura de los principios del paradigma de la Democracia Participativa Ambiental.

Nos importa dar la disputa institucional para reconfigurar la democracia porteña a fin de que la ciudadanía porteña sea codecisora de las políticas urbanas que definen el destino de la Ciudad. Vamos a ser un espacio que acompañará con la experiencia, saberes y el cuerpo a cada una de las asambleas que se encuentran practicando la ética del cuidado, defendiendo la ciudad. El poder económico inmobiliario financiero está desbocado. El jueves 2 de diciembre se votará en la Legislatura porteña el emprendimiento inmobiliario en Costa Salguero en la Costanera Norte, el nuevo Puerto Madero que impulsa IRSA en la Costanera Sur llamado Costa Urbana y más de una decena de convenios urbanísticos y nuevas torres en la ciudad. Uno de los caminos para poner freno a este delirio inmobiliario es promover una nueva forma de organización ciudadana.”

“A 20 años de la irrupción del pueblo en las jornadas del 19 y 20 de diciembre y con el centro en el protagonismo del conjunto de les vecines que viven a diario las dificultades propias de esta ciudad con presupuesto europeo, pero con miles viviendo en las calles o con condiciones de hacinamiento, falta de servicios públicos esenciales como el agua y con enormes precariedades, venimos a demostrar que no todo está perdido. La derecha querrá siempre excluir, discriminar y dar de baja derechos, pero las asambleas y quienes queremos otra historia nos organizaremos para que el Gobierno sea para todes y no solo para unos poquitos”, afirma Alejo Caivano, integrante de la agrupación. 

Les integrantes de El Movimiento ya venían trabajando en diversas campañas, como  por ejemplo, Costanera Verde y Pública, que busca defender la costa del río de los negocios inmobiliarios; y también Se Va Buenos Aires, una campaña que tiene como objetivo visibilizar y denunciar la pérdida de identidad de la Ciudad ante los negociados inmobiliarios que solo generan especulación en un distrito carente de espacios verdes y soluciones habitacionales para las personas en situación de calle o que viven en viviendas precarias.

El desafío que se aproxima es romper la lógica de la gobernabilidad en la Ciudad de Buenos Aires, basada en la convivencia entre el poder político y el poder económico. “Esto nos compromete a organizarnos desde los movimientos urbanos con una lógica diferente, la de la Democracia Participativa Ambiental, para poder disputar la institucionalidad”, explican desde la organización.

La intención ahora es unificar fuerzas para conformar un espacio sólido que buscará brindar soluciones reales ante las problemáticas que atraviesa el conjunto de la ciudadanía. 

Fuente: https://observatoriociudad.org/se-lanz%C3%B3-un-nuevo-espacio-pol%C3%ADtico-en-la-caba-el-movimiento-la-ciudad-somos-quienes-la-habitamos/

Comprobamos que: -atribuye al gobierno de Larreta lo que es propio del capitalismo y las diferencias en gestionarlo de la derecha explícita con la progresista son cada vez más minúsculas; -aísla la Ciudad de Buenos Aires artificial y contraproducentemente del país, del continente y del mundo como aclaro en https://confraternizarhoy.com.ar/temas-anteriores/debato-y-opino/; -adopta como paradigma al de la Democracia Participativa Ambiental, cuando décadas de gobiernos progresistas han demostrado su falsedad a causa de la vigencia total y totalitaria del acaparamiento oligopólico de los bienes comunes sociales y naturales mediante la contrarreforma agraria integral que implantan los extractivismos; -disputa de la institucionalidad desde unión de fuerzas para brindar soluciones reales ante las problemáticas que atraviesa el conjunto de la ciudadanía. 

Observemos que vuelve la espalda a las disputas (existentes en todo el país) de territorios de la gran variedad de autoorganizaciones de los vecinos y comunidades de pueblos originarios ante el avasallamiento de derechos tanto de los pueblos como de la naturaleza (estos últimos corresponden a su funcionamiento esencial a la vida) por la acelerada e intensificada expansión de los extractivismos que gestiona el gobierno de los Fernández junto a todos los gobiernos provinciales de un bando u otro de la falsa grieta cuya función es polarizar las elecciones a fin de garantizar el statu quo. Además, discutamos uniformarnos –respetando nuestro embaucamiento por quienes nos oprimen y dominan- con la etiqueta de “ciudadanía” peculiar a la vigente democracia fachada de la dictadura gran capitalista e imperialista.

Rumbo antagónico es el de la Unión de Asambleas de Comunidades (UAC) por la vida contra el saqueo y la contaminación ambiental. Reflexionemos sobre qué escribí en Debato y opino:

Consideremos porqué es importante constituir una asamblea de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) o mejor del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) según los principios de horizontalidad y de autonomía tanto del Estado como de los partidos políticos, organizaciones sindicales y ongs. en razón que funcionan contra la autodeterminación de los pueblos.

Es una asamblea procurando construirse democracia directa y con independencia tanto del bloque opresor como de las organizaciones adaptadas a las reglas dominantes de juego. De modo que
 se reconoce integrante de la Unión de Asambleas de Comunidades por la Vida contra el saqueo y la contaminación ambiental. Y disputa la percepción de los bonaerenses (conocimiento con su consecuente toma de partido) sobre cómo el régimen extractivista es ecocida-genocida no sólo en las oficializadas como «zonas de sacrificio» sino también desertifica a todo el país-continente en los varios sentidos del concepto y agrava la condición del AMBA de ser megalópolis como resultante del subdesarrollo creciente de Argentina debido a los extractivismos.

Asumir la realidad arraigada en AMBA pero contextualizándola en cómo el régimen extractivista arrasa al país y a todo el Abya Yala exige enfrentar al predominio, abajo y a la izquierda, del enfoque socioambiental de carácter electoralero y por tanto, reformista que, a causa de serlo, subordina a las reglas de juego del sistema o sea encamina hacia la derrota a las diversidades de abajo.

Apreciemos sobre la crisis de las izquierdas partidarias que las convierte en electoraleras o bien en dar apoyo crítico a Cristina Fernández de Kirchner. Ejemplifiquemos el grado de degradación alcanzado por Razón y Revolución en:

ARGENTINA 2050. UNA VÍA SOCIALISTA POSIBLE

Publicado el 16/05/2022,25/05/2022 en Novedades/Vía Socialista

Ya podés ver el video de la presentación del programa de Vía Socialista, el frente electoral de Razón y Revolución.

Somos un partido con una propuesta concreta: Argentina 2050, un programa de gobierno para cambiar el país en treinta años, conduciendo a la Argentina por una vía socialista real y posible. Planteamos que es posible conseguir una industria más competitiva con productividad coreana, con un nivel de vida sueco, impulsando la propiedad colectiva y la planificación desde el Estado.

Para llevar esta propuesta a las próximas elecciones, necesitamos conseguir la legalidad como partido. Para eso necesitamos, sobre todo, afiliaciones. Por eso, si coincidís con estas ideas y creés que podemos, acá y ahora, sacar a la Argentina del pozo y construir el socialismo, sumá tu afiliación. Podés hacerlo directamente online en el siguiente link: https://viasocialista.com.ar/afiliacion/

Tengamos en cuenta la alternancia de partidos de estado en el poder ejecutivo y legislativo, así como el nimio ingreso a diputados de partidos izquierdistas para comprender que nos mienten instalar la vía socialista valiéndose del Estado garante de expropiaciones y expoliaciones del gran capital. Aún más, en vez de un programa de iluminados, implica rumbo hacia «buenos vivires» como creaciones de pueblos y comunidades con autogestión de sus respectivos territorios.

Claro, Razón y Revolución mira hacia logros capitalistas que no son tales para las diversidades de abajo por basarse en principios de la sociedad de consumo y no valorar que esas diversidades establezcan nuevas relaciones entre ellas hacia la sociedad en acuerdo con sus necesidades e intereses y nuevas relaciones del trabajo con la naturaleza.

Concentración y centralización capitalista

Destaquemos la criminalidad del capitalismo de lesa humanidad y de lesa naturaleza al acaparar la escasísima agua dulce del planeta para despilfarrarla, envenenarla y mercantilizarla cuando esencial a las estructuras y funcionamiento tanto de la vida humana-no humana como de la naturaleza. Advirtamos:

El agua es vida

10 de diciembre de 2022

Por Luís Britto García

luisbrittogarcia.blogspot.com/

El agua cubre más del 70% de la superficie del planeta, aunque en total equivale a la milésima parte de la masa de éste. Entre sus subproductos, la vida. Ésta surgió de los océanos, sin romper nunca la dependencia del agua. Los ríos llevan al mar todos los desechos de la tierra, entre ellos la sal, que los hace impotables para quienes los abandonaron. Sólo un 2,5% del agua es dulce. De esta modesta fracción dependemos todos.

 Nuestro cuerpo contiene un 90% de agua. Hay quien  resiste ayunos de un mes; no es posible subsistir más de seis días sin agua. Un cálculo aproximado revela que producir un kilo de carne requiere unos  6 de vegetales y 15.000 litros de agua. Provechoso entretenimiento resultaría saber las magnitudes exactas que requieren la producción de un vestido, un palacio, una muralla, un arma.

 Cada modo de producción tiene su manera de tratar el agua, que se parece a la forma en que trata a los humanos. La vida vegetal, animal y  humana tiende a concentrarse en los  humedales; las primeras civilizaciones, en el curso de los ríos. Su aprovechamiento mediante represas, canales y acequias sustenta  las  grandes poblaciones de Mesopotamia, Egipto, la India, China, Tenochtitlán. Del excedente económico de los cultivos brotan las más complejas formas de la cultura.

 El modo de producción capitalista redujo al hombre a mercancía,  y  trata de hacer lo mismo con las aguas. Aprovechó la abundancia del uno y las otras para explotarlos inmisericordemente; envileció y contaminó a ambos. En su Diccionario del siglo XXI, predijo Jacques Attali que las guerras de esta centuria serían por el agua. Quien lo dude, puede observar cómo la mayoría de los ríos europeos,  y gran parte de los del Asia, están defendidos por complejas maquinarias militares capaces de aniquilar el mundo. Hace siglos que los imperios flanquean las desembocaduras de los grandes cauces de agua con bases que les permitirían dominar el interior: desde los tiempos clásicos enclaves en las bocas del Nilo; Shangai en la salida del Río Amarillo; Cartagena de Indias cerca del Magdalena; Manhattan en el desaguadero del Hudson; Trinidad frente al Delta del Orinoco; las Malvinas en las cercanías del Río de la Plata; el cinturón de bases estadounidenses alrededor de los ríos que nutren el Canal de Panamá. El Mississippi permitió articular el Norte y Sur de Estados Unidos; estratégicos canales podrían unir el Orinoco con el Río Negro, a éste con el Amazonas y el Paraná y el Río de la Plata para integrar económicamente América del Sur. Sobre la erección y posesión de estos enclaves y canales se han constituido y hundido poderes.

 El control sobre las riquezas del mundo requiere el  de la vida que las produce, distribuye y consume; y  el control de la vida requiere el del agua. La privatización de ambas significa que caerán bajo el control del 1% de la población adulta mundial que en la actualidad posee más del 45% de la riqueza del mundo. Casi no hay poder que no haya intentado apropiarse del preciado líquido. El capitalismo financiero dio el paso decisivo en tal sentido  a mediados de diciembre de 2020, cuando los títulos de derecho al uso de agua cotizaron en la Bolsa de Wall Street a 486 US$ por un millón 233 litros en el “Indice del Agua Nasdaq Veles California”, del grupo CME.  En las experiencias conocidas hasta ahora, los capitalistas han utilizado el control de los sistemas de acopio, tratamiento y distribución de las aguas en beneficio propio y no de los usuarios. Salvador Peniche Camps, economista y académico de la Universidad de Guadalajara, apunta que  “Al inversionista le interesa asegurar que le vas a pagar y que va a recibir dinero independientemente de la salud y del ciclo del agua, y el agua no es infinita, ni la puedes hacer, le estás poniendo un precio a la vida” (https://www.animalpolitico.com/elsabueso/agua-cotiza-wall-street-a-que-se-debe-y-significa/).

 El Tercer Mundo posee la mayor parte de los recursos del planeta; América Latina tiene cinco veces más agua per cápita que Asia Oriental (https://blogs.worldbank.org/es/opendata/siete-cosas-que-tal-vez-no-sepa-sobre-el-agua). La rebatiña se desata sobre el Nuevo Mundo. Quien lo dude, recuerde que en 1993 el estado mexicano de Aguascalientes privatizó el servicio del agua a favor de una empresa que aumentó la tarifa en 170% y a pesar de ello debió ser rescatada por el Fisco (Torregrosa et al., pp. 37-38 y 41-44). En Buenos Aires, la empresa Aguas Argentinas incrementó las tarifas 88,2% entre 1993 y 2002, periodo durante el cual la inflación aumentó apenas 7,3%. En Tucumán, en 1993 se otorgó una concesión a la empresa Aguas del Aconquija, la cual incrementó sus tarifas 106%.  A principios de siglo en Bolivia una ley privatizó  el suministro de agua, prohibió a los particulares cavar pozos para obtenerla o almacenar la de lluvia: una sublevación popular suspendió el negocio. En Venezuela, Hugo Rafael Chávez Frías vetó una Ley Orgánica de la Hacienda Pública Estadal que permitía privatizar ríos, lagos y lagunas por mayoría de una Asamblea Legislativa estadal. Alrededor del Acuífero Guaraní, la mayor reserva subterránea de agua dulce del mundo, situada en la Triple Frontera de América del Sur, se han  plantado estratégicas bases militares estadounidenses que permitirían su control en caso de disputa.

Sobre estas desdichadas experiencias concluye José Esteban Castro que “El análisis del proceso de privatización de los servicios de agua y saneamiento en América Latina revela que éste fue producto de decisiones orientadas por la ideología neoliberal y no el resultado de la búsqueda de una solución efectiva a la crisis del sector. Esta estrategia, además, ha ignorado la evidencia histórica que demuestra que la universalización de estos servicios en Europa y Estados Unidos fue consecuencia de una acción decisiva del Estado. Pero aunque el enfoque privatizador ha fracasado, las transformaciones institucionales y políticas que se pusieron en marcha continuarán afectando la capacidad de los gobiernos de la región para superar la crisis de estos servicios esenciales” (Nueva Sociedad 207, Enero – Febrero 2007, ISSN: 0251-3552).

En las cuatro o cinco décadas que restan antes del agotamiento de la energía fósil, adquiere cada vez mayor relevancia el empleo de la fuerza hidroeléctrica que pueden generar las aguas dulces en su sosegado curso hacia los mares. Las represas segmentan los cauces de agua, con efectos negativos en la ecología, pero en la actualidad producen un 3,6% de la energía que el mundo consume, y que éste requiere cada vez más (REN21. (2017). Renewables 2017 Global Status Report. Recuperado de https://goo.gl/Pc2WuA). Se puede fabricar una represa, pero no el río que la llena ni las nubes que lo nutren. Una vez más debe el hombre respetar la naturaleza.

Privatizar las aguas es privatizar la vida.

Fuente: http://luisbrittogarcia.blogspot.com/2022/11/el-agua-es-vida.html

Examinemos cómo el sistema mundo capitalista y su local despliegan sus injusticias social, sanitaria y ambiental.

Vaca Muerta. Añelo, una desigualdad no convencional

13 diciembre, 2022

La localidad de Añelo es el epicentro de la explotación no convencional de gas y petróleo de Vaca Muerta. Sin embargo, quienes viven sobre la segunda reserva mundial de gas y la cuarta de petróleo, no pueden acceder a servicios básicos como gas, cloacas y agua potable.

Fuente: La izquierda diario

Por Silvina Fernández

(…) Los vecinos y vecinas autoconvocados de Añelo volvieron a cortar las rutas 7 y 17 por falta de agua en el barrio La Meseta. “Es un problema que arrastramos hace 12 años. Pero esta vez ni siquiera el camión municipal nos abastece para llenar los tanques como habían hecho hasta hace un año. Esto nos colmó la paciencia”, dijo Carolina, una de las vecinas. Después de cuatro días de protesta lograron el compromiso del Gobierno de la Provincia de proveer agua potable mediante camiones e iniciar obras a corto y mediano plazo para que las familias puedan acceder al agua.

“Las protestas de las vecinas y vecinos que vimos en la localidad de Añelo son parte de lo que llamamos como la desigualdad petrolera no convencional. Es decir, una economía de características de enclave en el que hay una minoría altamente beneficiada y una mayoría de la población que no tiene las condiciones mínimas e indispensables para la reproducción de su vida”, explica el especialista del OPSur Álvarez Mullally. La falta de agua potable contrasta con las grandes cantidades de agua que utilizan las petroleras de la zona para la extracción de shale y tight a través del método del fracking. “Son más de 90 millones de litros de agua que se usan por cada pozo y hoy en Vaca Muerta hay 3100”, aseguran desde el OPSur.

«Son más de 90 millones de litros de agua que se usan por cada pozo

y hoy en Vaca Muerta hay 3100″

El megaproyecto de Vaca Muerta se inscribe en un sistema energético que es altamente desigual y concentrado en grandes corporaciones que proyectan facturar 3 billones de pesos en el año 2023. Mientras la formación geológica estrella de la provincia de Neuquén produjo en octubre la mayor cantidad de crudo de los últimos 23 años, un 37.8 % de la población es pobre en la provincia de Neuquén. Las cifras del INDEC confirman lo que perciben más de 300 mil neuquinos y neuquinas que viven por debajo de la línea de pobreza: si crecen la producción y las ganancias empresariales pero también crece la pobreza, no hay progreso, hay saqueo, hay desigualdad.

Fuente: https://noalamina.org/extractivismos/item/46283-vaca-muerta-anelo-una-desigualdad-no-convencional

Destapemos cómo se construye e impone la monopolización del agua potable. Y al mismo tiempo, generalicemos el sinsentido de seguir alentando esperanzas en las elecciones para las diversidades de abajo.

Una empresa estatal israelí en la Argentina

El agua, el nuevo botín

9 de noviembre de 2022

Por Susana Lara /El Cohete a la Luna

La empresa estatal israelí que secó el río Jordán —aquel en cuyas aguas fue bautizado Jesús y ungido Mesías por el cristianismo— se afianza en la Argentina para el proceso de creación de un mercado del agua de consumo humano, productivo e industrial.

A diez años del proyecto frustrado en la provincia de Buenos Aires, Mekorot Israel National Water Co firmó un acuerdo con el Gobierno nacional que le permite iniciar negocios para la gestión integral de los recursos hídricos de cinco provincias, en tanto que mantiene avanzadas conversaciones al menos con dos municipios sobre la costa del río Paraná. La misma empresa realiza inversiones en infraestructura de agua y salubridad por otro memorándum de entendimiento firmado el año pasado, los que se articulan estratégicamente.

“Uno de los objetivos principales de la política hídrica en Israel fue que la gestión del recurso esté centralizada en pocas instituciones con una clara delimitación de las facultades y responsabilidades de cada una”, según el análisis de Evangelina Dardati, economista chilena. Mekorot es uno de los cinco puntales de ese modelo.

La empresa firmó un acuerdo para la gestión integral de los recursos hídricos superficiales y subterráneos con el Consejo Federal de Inversiones (CFI), quien a su vez lo hizo con los gobiernos de las provincias de San Juan, Mendoza, Catamarca, La Rioja y Río Negro. Las declaraciones oficiales de funcionarios públicos y de los directivos de la empresa permiten interpretar los alcances del acuerdo de negocios plasmados en los respectivos convenios particulares. Arancelamiento de todos los servicios de aguas, modificación de las leyes provinciales y de sus organismos de aplicación, reordenamiento total de los usos y destinos de la infraestructura existente, creación de valores económicos y financieros para establecer un costo del agua en la Argentina, nacionalización y centralización de algunos sectores del mercado, entre otros objetivos de esta gran reforma que pretende completar y perfeccionar la de los ’90.

En este caso, el conflicto se plantea por dos frentes. Por una parte, por el plan de negocios neoliberal para el agua dulce potable, recurso estratégico comparable a la tierra libre de agroquímicos y de ocupantes con título de propiedad privada. Por otra, Mekorot es una de las empresas cuyas prácticas fueron condenadas por el Relator Especial de la ONU para los Territorios Palestinos Ocupados, Michael Lynk, con rol clave en el proceso calificado como apartheid contra el pueblo palestino en Gaza, Cisjordania y Jerusalén este. El último informe del Comisionado se hizo público en el 25 de marzo pasado; un mes después después, una misión argentina encabezada por el ministro del Interior, Wado de Pedro, recorrió las obras modelo de Mekorot que privan de a Palestina agua en calidad y cantidad suficiente para una vida digna.

El interés de siempre

Como para empezar de cero, sin el lastre de los negociados menemistas, los funcionarios públicos nacionales y provinciales insisten en hablar del acuerdo con Mekorot como reciente, de menos de dos años.

La Argentina e Israel firmaron en 1995 un acuerdo de cooperación comercial y económica. Uno de los antecedentes importantes es el acuerdo del Gobierno de La Pampa e Itzhak Aviran, embajador de Israel en la Argentina a partir de una gestión personal de Osvaldo Roberto Schvartzer, en su rol de presidente de la Asociación Argentina de Amigos de la Universidad de Ben Gurión. El economista estuvo involucrado en los 90 en el cobro y uso de 17 millones de pesos en concepto de ATN (aportes del tesoro nacional) cedidos por la cartera de Carlos Corach a la embajada israelí en Buenos Aires. Años después, le armó la gira de negocios por Israel a Mauricio Macri cuando era Presidente.

Para 2003 Jorge Sobisch, gobernador de Neuquén, avanzó con un proyecto de irrigación de 40.000 hectáreas en el que aparece el grupo de intereses que confluía en la embajada de Israel. Dos años después, le otorgó en forma directa (sin licitación ni concurso público) a la consultora The Israeli Consulting and Technological Company Ltd. (ITC) el diseño de un proyecto de desarrollo agroproductivo para la zona comprendida entre Arroyito, El Chocón y Challacó. El ingeniero Ernesto Schvartzer, sobrino de Osvaldo, armó ITC, brazo técnico-comercial de la Universidad Ben Gurion, con la que ejecuta proyectos de agricultura intensiva en varios países. Hicieron pie en el Valle de Antinaco (La Rioja), Formosa, Salta —de la mano del grupo Socma (Macri)—, así como en Choele Choel y el Idevi (Río Negro), con el discurso de la ampliación de la frontera agropecuaria y la incorporación de tecnología eficiente para el riego de suelos áridos.

El grupo de negocios incluyó socios locales. En 2007 fructificó la alianza con la Federación Nacional de Trabajadores de Obras Sanitarias de la República Argentina (FENTOS). Ese mismo año el gobierno de Río Negro alcanzó un acuerdo con objetivos generales similares a los de hoy. En 2008 Chubut firmó un convenio marco con la dupla gremial-empresaria cuyo desarrollo se fue licuando. Ese mismo año, el ex gobernador Daniel Scioli decretó de interés público un proyecto de saneamiento de aguas en La Plata, que no soportó los cuestionamientos técnicos y políticos y naufragó. En 2009 la empresa anunció su interés por participar del armado y emplazamiento del Polo Industrial y Tecnológico de Bariloche. Por su parte, Juan Schiaretti, actual gobernador de Córdoba y también en 2010, analizó en  ese entonces la posibilidad de un acueducto entre el río Paraná y Córdoba.

Muchos de estos proyectos merecen revisarse en profundidad para entender un modo de acumulación de capital asociado a los Estados, los elencos locales de los partidos políticos y la burocracia sindical en el anclaje territorial del modelo neoliberal.

Otros capitales trasnacionales acapararon la atención con la transformación estructural del territorio que emergió con la soja transgénica, los desmontes masivos y el acaparamiento de tierras rurales para nuevas rentas de la naturaleza. Así, no llamó la atención cuando en 2020 reapareció Mekorot en negociaciones con el Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (ENOHSA), las que se formalizaron el año pasado. “Mekorot contribuirá en el desarrollo de proyectos de alto impacto para el fortalecimiento de las capacidades de gestión en los servicios de agua y saneamiento a través de un equipo de expertos israelíes con experiencia probada en la gestión de los recursos hídricos. La realización de estudios de viabilidad y de proyectos de tecnología aplicada a los recursos hídricos es uno de los puntos incluidos en el acuerdo. También la elaboración de informes, el asesoramiento, el fortalecimiento de los marcos legales y la planificación”, informó la Cámara de Comercio Argentino Israelí.

El proyecto, lxs proyectistas

“Queremos nacionalizar la gestión de los recursos hídricos. Tenemos un borrador en base a la experiencia de Israel, Estados Unidos y Australia, y al regreso del viaje discutiremos con los gobernadores las mejores opciones. Nuestra propuesta es que haya una sola autoridad del agua en el país”, dijo De Pedro a la salida de la planta Eshkol, en abril. Participa de este proyecto Malena Galmarini, presidenta de Agua y Saneamientos Argentinos (AySA), con la presencia de José Luis Lingeri, integrante del directorio y nexo con las fallidas inversiones en La Plata y Bahía Blanca de hace una década.

Mekorot tiene dos subsidiarias, Mekorot Desalination and Enterprise y Mekorot Development & Enterprise LTD. Esta última es la que integró la UTE para una obra en La Plata que Lingiere conoció de adentro. Por parte de la empresa, participó de las negociaciones con el ENOSHA Moti Shiri, director ejecutivo de Mekorot Desalination. En el acuerdo canalizado por CFI, Barak Graber y Diego Berger. Graber integra los directorios de las firmas con que desarrollaron y operan dos plantas desalinizadoras en Chipre. En tanto, Berger juega de local; nació en Argentina y se radicó en Israel. En mayo participó de actividades en Chile, donde informó al Senado sobre aspectos de la gestión del agua en vista de la reforma constitucional que por entonces se definía.

Los anuncios oficiales no fueron acompañados por la documentación pública correspondiente. La única copia disponible se publicó en el Boletín Oficial después de que la Asamblea Popular por el Agua de Mendoza la reclamara formalmente con una abogada. De esa copia se desprende que al menos Mendoza firmó dos acuerdos con el CFI. El 11 de agosto acordó la realización del “Plan integral para la sustentabilidad del sistema hídrico provincial” por el plazo de dos años. El 5 de septiembre el “Convenio marco de cooperación – Lineamientos técnicos, parámetros y principios de funcionamiento aplicables a la elaboración de un plan maestro para el sector hídrico de la provincia”.

Rodolfo Alejandro Suárez, gobernador de Mendoza, refrendó por decreto el primer acuerdo, que en los considerando indica que comprende cinco proyectos concurrentes: “1) Plan Maestro para el sector hídrico; 2) Código de Aguas para la Provincia de Mendoza; 3) Herramientas para la optimización de la disponibilidad hídrica; 4) Fortalecimiento del programa de inversiones en cauce; y 5) Fortalecimiento de la gobernanza del sistema”. En el segundo acuerdo consta que la cooperación se inicia con la contratación por parte del CFI a la consultora Mekorot Israel National Water para definir los lineamientos técnicos, parámetros y principios de uso sostenible de los recursos hídricos y la adquisición de las capacidades necesarias para la gestión sustentable de estos. Esos términos vagos se delimitan un poco más cuando indica que el proyecto realizará “un análisis del potencial de los recursos hídricos (aguas superficiales y subterráneas); la creación de proyecciones de la demanda de agua (urbana, rural y de riego) para crear un sistema de asignación que permita regular la demanda de agua; definir planes alternativos de abastecimiento de agua”, entre otros objetivos. Mendoza tiene una ley provincial de aguas y una autoridad de aplicación local, el Departamento General de Irrigación (DGI).

Otros pocos detalles surgen de las declaraciones de lxs gobernadorxs firmantes. Río Negro anunció que en dos meses entregará el contenido para el desarrollo del Plan Maestro local, que quedó en manos del Departamento Provincial de Agua (DPA), autoridad de aplicación del código de aguas local. La propuesta propia incluirá una “evaluación de alternativas de desalinización para abastecimiento de agua potable en la región sur y en poblaciones de la zona atlántica; la planificación y optimización de la reutilización de los efluentes generados en las plantas de tratamiento de líquidos cloacales; un análisis de funcionamiento y eficiencia de los sistemas de riego y drenaje, para realizar posteriores planes de reacondicionamiento o modernización; un análisis económico, balance prospectivo y recomendaciones para alcanzar un desarrollo equilibrado, trabajando sobre el valor económico del agua que permita alcanzar un financiamiento genuino de la gestión integrada de los recursos hídricos”, informó la gobernadora Arabela Carreras.

La provincia hizo propio el viejo interés de Mekorot por una planta desalinizadora en Sierra Grande, opción que reflotó el desarrollo del proyecto de hidrógeno verde en Punta Colorada.

Palestina, pueblo originario

Maren Mantovani, coordinadora de relaciones internacionales de la campaña palestina Stop the Wall (Paremos el muro), regresó a la Argentina por Mekorot. Había participado de la campaña de esclarecimiento “Buenos Aires, aguas turbias” por el proyecto de La Plata. La Asamblea Permanente por los Derechos Humanos y la Liga Argentina por los DD.HH. organizaron la presencia de la activista en Esquel (Chubut), donde planteó el tema del dominio del agua para tener el control territorial en el caso de Palestina.

“La acción de Mekorot en Palestina es mucho más que la mercantilización del agua, es el uso estratégico del control del agua para expulsar a las comunidades de los territorios al despojarlos del recurso”, argumentó Mantovani en una conversación virtual. Israel tiene centralizado el uso del agua que es exclusivo dominio estatal. En el control estatal del recurso, Mekorot es la única empresa del sector, brazo técnico de la estrategia de gobierno para con Palestina.

En los reclamos internacionales, consta que extrae una cantidad de agua de los territorios palestinos ocupados que excede la regla de usufructo de las Regulaciones de La Haya y, por lo tanto, viola el derecho internacional humanitario (DIH). Israel prohíbe totalmente a los palestinos abrir nuevos pozos; al mismo tiempo, Mekorot perfora al lado sus pozos más profundos para los asentamientos israelíes de forma ilimitada, mientras restringe el suministro de agua para las comunidades palestinas en la misma región. Estas prácticas empresarias son violatorias de numerosos pactos internacionales.

“Como Sudáfrica y Namibia, Israel comete el delito de apartheid”, sintetizó Mantovani. En ese sentido, en su informe en la sesión 49 del Consejo de Derechos Humanos, el relator especial Lynk advirtió sobre “la transición de un estado de ocupación —que ya supone un desafío al derecho internacional—, a convertirse en un régimen de apartheid asumido por el gobierno israelí (…). Su prohibición incluso constituye una norma imperativa del derecho internacional”.

Dice la Biblia que el pueblo de Israel cruzó a la tierra prometida por el sur del río Jordán, cuyo caudal languidece por años de sobreexplotación para riego y agua potable de la colonización de los territorios palestinos. En su desembocadura, el mar Muerto desciende al perder el único aporte de este afluente de agua dulce.

Envuelto en los discursos del cambio climático y la transición de la matriz energética, la reforma estructural que plantea el gobierno nacional para con el agua dulce potable, en acuerdo con los gobernadores de distinta extracción política, plantea un conflicto de impacto masivo y a mediano plazo. De todos modos, cuesta imaginar un futuro en que las petroleras paguen a precio de mercado el agua del fracking en Vaca Muerta, que los estancieros paguen por usar el agua sin restricciones o se cobre el derroche en piscinas de las viviendas de alta gama.

Fuente: https://rebelion.org/el-agua-el-nuevo-botin/

Alternativas emancipatorias

Situémonos en la defensa de lo común e historia de autoorganizaciones para la resistencia. Y ubiquémonos en qué consisten las consecuencias del avance del modo capitalista de producción y consumo.

Manifiesto de la 43° Asamblea Anual de la Red Nacional de Acción Ecologista

Entre el Mar Argentino y el río Quequén Grande, nos encontramos en Necochea del 9 al 11 de diciembre de 2022 en el marco de la 43° Asamblea Anual de la RENACE. Continuamos con el legado de todxs aquellxs compañerxs que no están entre nosotrxs y reafirmamos su compromiso por la defensa de lo común. Plantamos árboles para honrar su memoria y, simbólicamente, celebrar su vida. Carlos Vicente, Javier Rodríguez Pardo, Miguel Grinberg, Elio Brailovsky, Beto Aguirre, Valentín Stiglitz, Patricia Chechele presentes, AHORA Y SIEMPRE.

Las organizaciones miembro de RENACE reafirmamos nuestra lucha contra el extractivismo, por la defensa de los territorios y los Bienes Comunes, y ratificamos nuestra convicción de constituirnos como red ecologista antifascista, federal, antipatriarcal y en la búsqueda del Buen Vivir.

Esta Red, que cuenta con 38 años de existencia, reafirma su acción ecologista junto a todas las luchas por la defensa de los bienes comunes, del agua y del territorio como elementos enhebradores de las resistencias.

Ratificamos nuestro rechazo al actual modelo de producción y consumo, que ha alterado y destruido los sistemas sostenedores de la vida, con terribles impactos en nuestros territorios, ecosistemas y, por ende, nuestros cuerpos.

Insistimos en la reivindicación de la autonomía de los pueblos originarios, su cultura, territorio y la recuperación de sus identidades. Rechazamos la embestida extractivista en sus territorios y denunciamos la construcción de la imagen del pueblo mapuche y otros pueblos ancestrales como el “enemigo interno” por parte de grupos de poder con una ideología supremacista que  radicaliza y justifica la violencia. Denunciamos, además, el chineo, como una práctica de ultraje y violación hacia las niñeces Indígenas en el Norte Argentino.

Ante la avanzada de la represión y criminalización por parte del Estado, de fuerzas de seguridad estatales y paraestatales y los grupos de poder, la RENACE se manifiesta en alerta permanente frente a las siguientes situaciones: represión; judicialización de las personas que ponen su cuerpo y vida en las luchas socioambientales; intimidación y espionaje para la desmovilización popular en la defensa de los territorios y los bienes comunes, y el impulso de la legislación restrictiva para la movilización.

Nos solidarizamos con lxs compañerxs miembros de la RENACE perseguidxs, detenidxs y criminalizadxs en el marco del ChubutAGUAzo; compañerxs que defienden el territorio y el agua en Andalgalá y Choya en Catamarca; vecinxs de Casilda, provincia de Santa Fe, que resisten ante la avanzada del parque industrial sobre los espacios comunes; las mujeres mapuche detenidas en Villa Mascardi, entre otrxs.

Nuestra red se hermana con las luchas de los pueblos que resisten:

*a la avanzada en el noroeste argentino de la megaminería con el proyecto MARA (proyecto minero Agua Rica-La Alumbrera) en los nevados del Aconquija y la minería de litio en los Humedales altoandinos de Catamarca, Salta y Jujuy.

*a la exploración y explotación de petróleo en aguas profundas del Mar Argentino, poniendo en riesgo la actividad pesquera, el ecosistema marino y las economías locales.

*a los intentos de avanzar nuevamente con la megaminería en las provincias de Río Negro y Chubut, y la propuesta de explotar litio en Río Negro desoyendo el contundente rechazo social.

*al proyecto de desarrollo del hidrógeno verde a gran escala, impulsado en las provincias patagónicas de Río Negro y Chubut por la corporación australiana Fortescue, entregando centenares de miles de hectáreas para la transición energética de países de Europa, EE.UU. y Australia.

*a la avanzada del plan nuclear y el intento de instalar el reactor nuclear chino Hualong One en provincia de Buenos Aires.  Denunciamos también la escandalosa emisión de tritio y cobalto radiactivo detectado por la Autoridad Regulatoria Nuclear (ARN) en las aguas del río Paraná y en escuelas de la zona, como así también en el lago Embalse y la cuenca del río Ctalamochita en Córdoba, superando miles de veces la normativa de otros países.

* a las quemas y destrucción de los diversos humedales existentes en todo el territorio nacional, por parte del extractivismo inmobiliario y la presión del modelo agroindustrial.

*a la privatización y entrega de los espacios y tierras públicas al servicio de las apetencias de la industria inmobiliaria a lo largo y ancho de nuestro país.

*al intento de represamiento de nuestros ríos y trasvasamiento de cuencas con acueductos, ambas presentadas como infraestructuras necesarias para el desarrollo de nuestros pueblos, ocultando las verdaderas razones ligadas a los proyectos de extractivismo minero, agrícola e inmobiliario que acechan a nuestros territorios.

*al avance de la frontera agrícola, intensificando el sistema de producción agroindustrial químico transgénico dependiente, que arrasa con nuestros bosques nativos, envenena nuestras aguas y suelos, contamina el aire, enferma y mata, destruyendo la diversidad biológica y cultural de las comunidades que los habitamos.

En este sentido, hacemos responsable a los gobiernos por el incumplimiento de velar por la salud de la población, particularmente en relación al agua de consumo y  reclamamos que sean incorporados en el listado del Código Alimentario Nacional como obligatorios los análisis de agroquímicos que son utilizados en la producción (con particularidad según región productiva) y que ya han sido encontrados en estudios realizados por científicos dignos de nuestras universidades.

* al avance de megaproyectos de infraestructura física al servicio del extractivismo, como la carretera de Punilla, en la provincia de Córdoba.

* a la ampliación de los puertos agroexportadores con el solo fin de aumentar el ingreso de divisas que llega a los bolsillos de empresas transnacionales y sus testaferros locales en detrimento de la salud de las comunidades , de la fauna marina circundante y de la calidad de las aguas fluviales y marítimas.

* ante los acuerdos que múltiples provincias están realizando con la Compañía Nacional de Agua de Israel, Mekorot (la cual ha violado sistemáticamente el derecho humano de acceso al agua del pueblo Palestino), para el desarrollo de un Plan Maestro del Sector Hídrico en esas provincias.

Sangran nuestros territorios y las respuestas de parte del poder económico y político mundial, en sus niveles regionales, nacionales, y locales, profundizan su destrucción, contaminación y mercantilización y saqueo, con más extractivismo, a través de la puesta en marcha de propuestas engañosas bajo el ropaje de “soluciones  verdes”: electromovilidad, megaminería de litio, cobre y tierras raras, hidrógeno verde, energías no convencionales, energía nuclear, geoingeniería, compensaciones y mercados de bonos de carbono, agricultura industrial, “buenas prácticas”, entre otras, legitimadas por  fundaciones filantrópicas y pseudo-ambientalistas, universidades y centros de investigación.

Denunciamos a la Corte Suprema de Justicia de la Nación por el incumplimiento de los tiempos de respuesta a los amparos ambientales que duermen en los escritorios mientras el ecocidio continúa.

Desde RENACE, reafirmamos nuestras luchas y resistencias e insistimos en la necesidad de continuar fortaleciendo las construcciones de esos otros futuros posibles, de la mano de la soberanía alimentaria, la producción y el consumo consciente, las universidades al servicio de las necesidades de los pueblos y los caminos comunitarios hacía el buen vivir. Y sabemos que no estamos solxs.

Necochea, Diciembre 2022

Tengamos en cuenta qué señala el Renace sobre la necesidad de continuar en la construcción de otros futuros posibles. Y atendamos:

Hace un año, ante la notable sequía, el gobierno de Chubut declara emergencia hídrica y otorga facultades extraordinarias al Instituto Provincial del Agua (IPA) que renovó el permiso a la Pan American Silver pese a estar vaciando los afluentes subterráneos de la cuenca del Sacanana y provocando la remisión de las napas en la zona. También las petroleras secaron el lago Colhue Huapi y lo reemplazan por el lago Musters, En contraste, el IPA desoyó a miles de presentaciones de los vecinos y organizaciones de toda la provincia en defensa de la producción, la salud y la biodiversidad. Más aún el director de IPA, Cittadini publicitó un plan de construcción de cinco megaproyectos de alto impacto en las cuencas superficiales ya deterioradas.

La Unión de Asambleas de las Comunidades de Chubut (https://www.facebook.com/unionasambleasciudadanas) declara que “(…) las medidas propuestas corren graves riesgos de terminar redundando en nuevos beneficios para los mayores usurpadores de tierras ancestrales de la Patagonia: el grupo Benetton y su Compañía de Tierras del Sud. Este grupo económico transnacional es responsable de los principales endicamientos ilegales con el fin de acaparar agua en el curso de los ríos Chubut, Lepá, Gualjaina y sus afluentes; a su vez, es corresponsable -junto con diversos estamentos del estado provincial y nacional- de la invasión de especies exóticas como el pino en toda la zona de las nacientes del río Chubut y sus afluentes. El negociado de la pinificación tiene probados efectos negativos en el agua: baja el nivel freático y deseca manantiales, mallines y pequeños arroyos, mientras merma el caudal de otros cursos de agua (…)”.

Concluye: “ (…) Entendemos que la única garantía para evitar que nos sigan robando el agua es la organización comunitaria que nos permita caminar con autonomía hacia el «buen vivir», y es por eso que convocamos a todos los vecinos de Chubut a sumarse a las asambleas de sus localidades, a articularse en las redes de asambleas y a salir a luchar con todas las herramientas que tengan para ponerle un freno a los intereses de estos gobiernos y de las corporaciones que quieren saquear nuestro territorio. Todas las estrategias son válidas y la salida siempre es colectiva”.

La territorialidad insurgente tiene valiosos antecedentes en las de los «ayllus», comunidades de los pueblos andinos. En el libro Subversiones indígenas de 2008 (La Paz: Muela del Diablo Editores © Comuna © Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales) Raúl Prada Alcoreza explica que el ayllu ocupa el territorio de manera distinta a la cartografía de los repartimientos, propia de la geografía política de herencia colonial y con construcción de territorios sometidos.

« El ayllu en la multiplicidad de microrregiones andinas, la tenta en el Chaco guaraní y otras formas de organización política, social y cultural trascendieron a los tiempos, manteniendo no sólo en la memoria cultural las consecuencias de una organización que equilibra la propiedad comunitaria y las posesiones individuales, la manutención del espíritu comunitario y la adquisición de un perfil propio, individual, del iniciado, del guerrero, del adulto, del viejo, de la joven que se prepara para ingresar de lleno a las prácticas de la tradición, la mujer del matrimonio que articula familias, la adulta, la vieja. Todos estos perfiles propios se conjugan con los relativos al tótem, espíritus y dioses de concepciones politeístas; es decir, con el reconocimiento pleno de la comunidad en interacción con la territorialidad, con la circulación de los climas y las significaciones de los astros, en su trayectoria mítica en el firmamento. La territorialidad forma el comienzo, la herencia, la tradición, nuestra morada, donde compartimos con plantas, ríos, bosques, cerros, animales, el destino definido por los dioses en guerra entre el caos y el orden, produciendo del caos el orden, de la desorganización la organización, convirtiendo la eternidad de los tiempos en un devenir.

La Colonia impuso sus formas de delimitación basadas en una concepción geográfica y política fundada en la guerra: los repartimientos, las reducciones, las ciudades. También impuso sus formas de propiedad: las encomiendas, las haciendas, las concesiones, las mercedías, las fundaciones, los obrajes, las misiones. A lo largo de ese periodo vemos el proceso de consolidación de estas instituciones de demarcación espacial y propiedad colonial; pero también vemos que concurre un proceso paralelo, el de la resistencia a la Colonia, el de la permanencia de las ancestrales formas territoriales, institucionales, políticas y culturales, aunque de manera encubierta, marginal y en la penumbra de las visibilidades históricas de las formaciones sociales.»

Add a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.